En un mundo donde la tecnología avanza a pasos agigantados, el juego y su interacción con las pantallas se han convertido en un tema central para las infancias. ¿Cómo equilibrar el tiempo al aire libre con el uso de dispositivos digitales? ¿Qué impacto tienen las diferentes formas de juego en el desarrollo de nuestros niños y niñas? En Transeúnte queremos abrir un espacio de diálogo crítico y constructivo sobre un tema fundamental en la vida de las infancias.
Juego y territorio
La geografía del juego varía considerablemente entre los contextos urbanos y rurales. Mientras que las ciudades ofrecen infraestructuras como parques y áreas de juego, las zonas rurales brindan espacios naturales abiertos. Para mejorar el acceso y la calidad del juego, así como las oportunidades de desarrollo infantil, es crucial optar por estrategias adaptadas a cada contexto.
En las zonas urbanas, es necesario invertir en la creación y el mantenimiento de espacios de juego seguros y accesibles, así como en la promoción de programas comunitarios inclusivos. En las áreas rurales, es importante desarrollar infraestructuras básicas y facilitar el acceso a recursos educativos y recreativos, aprovechando al máximo el entorno natural.
Además, fomentar la colaboración entre comunidades urbanas y rurales puede enriquecer las experiencias de juego de todos los niños, permitiéndoles disfrutar de una variedad de entornos y actividades. Promover el intercambio de ideas y recursos entre diferentes contextos geográficos puede contribuir a un desarrollo infantil más equilibrado y holístico, asegurando que todos los niños, independientemente de donde vivan, tengan acceso a experiencias de juego ricas y variadas.
Juegos al aire libre vs pantallas y videojuegos
El juego al aire libre ha sido siempre un pilar del desarrollo infantil, ofreciendo beneficios para la salud física y la interacción social. No obstante, los juegos en interiores también desempeñan un papel crucial, fomentando la creatividad y la seguridad en entornos controlados. La pregunta es: ¿cómo podemos equilibrar estas dos modalidades para proporcionar experiencias de juego completas y enriquecedoras?
Para responder esta pregunta, se han consultado diversas fuentes como el Observatorio del Juego Infantil, la Guía Niños en un mundo digital (Unicef: 2017), así como a especialistas en el tema los cuales recomiendan que es necesario equilibrar el juego al aire libre y el uso de dispositivos digitales para proporcionar experiencias completas y enriquecedoras, estableciendo un horario que incluya tiempo para ambas actividades.
Fomentar actividades familiares que combinen juego físico y digital, seleccionar aplicaciones y juegos educativos, y promover la exploración al aire libre son estrategias clave. Además, se recomienda que los padres y educadores deben reflejar un uso equilibrado y saludable de la tecnología.
Los dispositivos digitales y los juegos en línea han revolucionado la manera en que los niños juegan y aprenden. Sin embargo, este cambio también trae consigo preocupaciones sobre el tiempo de pantalla, la calidad del contenido, la seguridad y la socialización. Dichos dispositivos pueden ser utilizados de manera beneficiosa sin comprometer otros aspectos importantes del desarrollo infantil, como la actividad física, la socialización y el tiempo al aire libre.
En el marco de nuestro diálogo sobre infancias, juegos y pantallas, es relevante destacar iniciativas como el Desafío Mundial 2021 de la UNESCO Hacer las paces con la naturaleza en colaboración con el videojuego Minecraft. Este reto educativo invita a los niños a aprender sobre los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) a través del juego, fomentando la creatividad y la conciencia ambiental. Iniciativas como esta muestran cómo los videojuegos pueden ser herramientas poderosas para la educación y el desarrollo sostenible, integrando diversión y aprendizaje de manera significativa.
Establecer límites claros sobre el tiempo de uso y priorizar aplicaciones educativas son claves así como la integración del uso de dispositivos en una rutina diversa que incluya actividades al aire libre, lectura e interacciones personales que aseguren un desarrollo integral y balanceado.
La competencia entre el tiempo dedicado a las pantallas y a la lectura es un tema crucial. La lectura es esencial para el desarrollo cognitivo y el aprendizaje, mientras que las pantallas ofrecen interactividad y acceso a información. Estos dos mundos pueden coexistir y complementarse, promoviendo un desarrollo más integral.
La evolución tecnológica ha diversificado las formas de jugar, desde los tradicionales juegos físicos hasta las plataformas digitales. Estas diversas modalidades pueden coexistir y enriquecer la experiencia de juego, ofreciendo un espectro amplio de estímulos y aprendizajes. Innovaciones en el juego presentan nuevas formas de estimulación que pueden parecer más atractivas y educativas. Sin embargo, los juegos convencionales también poseen un valor intrínseco, especialmente en el desarrollo de habilidades motoras y sociales.
El impacto del juego en la salud y el desarrollo infantil es innegable, desde el fortalecimiento físico hasta la estimulación mental fomentando la interacción social y el trabajo en equipo, reforzando habilidades como la comunicación y la resolución de conflictos. Estas experiencias también promueven la creatividad y la imaginación, al permitir a los niños explorar y descubrir.
Es crucial que la planificación urbana y de vivienda considere de manera integral la inclusión de áreas de esparcimiento y juego para las infancias como parte fundamental del derecho a la vivienda digna. En la primera etapa de construcción por parte del Infonavit, se contemplaban áreas de juego con prototipos de juegos y mobiliario urbano, subrayando la importancia de estos espacios para el desarrollo integral de los niños.
Infonavit ha sido pionero en este enfoque, demostrando que, dentro de un entorno de vivienda bien planificado, se deben incluir espacios seguros y accesibles para el juego y la recreación infantil. Dentro de la exposición A jugar. Espacios de juegos en unidades habitacionales en el Munavi, podrás encontrar información detallada sobre los proyectos desarrollados por el instituto, donde las áreas de juego y el diseño de mobiliario urbano fueron elementos clave.
Estas áreas no solo contribuyen al desarrollo físico y emocional de los niños, sino que también fomentan comunidades más saludables y cohesionadas. Al priorizar la creación de espacios verdes y seguros dentro de los entornos urbanos, se promueve el acceso equitativo a experiencias de juego enriquecedoras, facilitando así un desarrollo integral y saludable para todas las familias y comunidades.
En el Espacio Cultural Infonavit, nuestro objetivo es crear un espacio donde se puedan compartir ideas, preocupaciones y soluciones sobre el juego en la vida de las infancias. Es por ello que, como parte del programa público de la exposición temporal A jugar. Espacios de juegos en unidades habitacionales en el Munavi, contaremos con las voces de expertas en educación, salud, juego e infancias para explorar las múltiples facetas del juego en el contexto contemporáneo en el panel Infancias, juegos y pantallas. Espacio de diálogo.
Invitamos a todas y todos a unirse a esta conversación esencial y enriquecedora el cual se llevará a cabo el próximo jueves 1 de agosto de 2024 a las 17:00, recuenda que la entrada es libre con previo registro https://munavi.mx/evento.html#134.
¡Te esperamos!
Celebro que se compartan temas tan de actualidad como este y del que puedo destacar la frase “Es crucial que la planificación urbana y de vivienda considere de manera integral la inclusión de áreas de esparcimiento y juego para las infancias como parte fundamental del derecho a la vivienda digna”. Y si, es fundamental los espacios de esparcimiento, la recreación, la convivencia y la socialización de nuestros niños y ahora más que nunca, donde las ciudades en la actualidad resultan muy violentas para nuestros pequeños habitantes. No obstante, a mi parecer, a este tema debe sumarse algo crucial, pues pensemos por un momento en que le ganamos la partida al tiempo de pantallas y que contamos con la infraestructura y equipamientos de ensueño para nuestros niños; ¿podríamos afirmar entonces, que eso garantiza que esos espacios estarán llenos de niños felices, creando y jugando?… no del todo. Llega a mi recuerdo ese título de un disco famoso hace ya algunos años “Dónde jugarán los niños?, para lo que le agregaría ahora ¿con quién jugarán los niños?. Es decir, es indispensable hablar de la nueva cultura laboral para que se agreguen, a esos espacios, a los adultos que tengan la oportunidad de destinar una hora, o al menos media hora, al acompañamiento de los niños. No se olvide, si espacios suficientes, pero también si acompañamiento suficiente. Entiendo, que puede resultar un problema complejo y multifactorial, pero al menos, si lo colocamos en el discurso, si lo visualizamos, empezaremos a vincularlo y acercarnos un poquito. ¡Saludos!